Leo un
periódico del 12 de junio de 2021, que las estatuas de Colón e Isabel la
Católica, son retiradas de madrugada en Bogotá, tras cuarenta seis días de huelga; donde la
ira de los ciudadanos, golpea a lo que no habla, a lo que no decide, a lo que no
importa. Dos estatuas, que si pudieran hablar, dialogarían con los hombres
acuciados, vencidos, derrotados, por el hambre, por la pobreza, por las malas
condiciones labores; sobrecargadas de un virus, totalmente, incontrolado, y
cuyas medidas de contención no son eficaces, pues es necesario cruzar calles, a
travesar caminos, bucear en medios de transporte, cargados de esperanza, que sueñan
con sobrevivir en el mundo de hoy, no en la conquista del pasado; que quedó anclada
hace siglos, adonde solo es necesario volver para escuchar documentos, objetos,
espacios, que nos inviten a entender sus circunstancias sin ser juzgadas,
puesto que las leyes del paso del tiempo las han borrado. Lo necesario para los
colombianos, es cambiar a aquellos que traicionan sus anhelos de sonreír.
Ana Tapias( todos los derechos reservados)©
No hay comentarios:
Publicar un comentario