miércoles, 7 de agosto de 2013

El despertar de mi ciudad

A las seis de la mañana iba camino al bus para ir a Madrid. A esa hora los barrenderos dominan las calles. He saludado a mi amigo Israel. Israel es el basurero más simpático de Segovia. Israel cada día afronta su trabajo con delicadeza. La delicadeza de acariciar calles para que luego pies con rumbo deseen ser felices. La felicidad es fácil de lograr si barres la calles cuando todos duermen y eres el único ser al que admirar.
 
Ana Maria Tapias Garcia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario