domingo, 29 de noviembre de 2015

La pereza

Estodias, he entendido lo díficil queescuchar las tragedias ajenas, nos parecen frívolas, alocadas, egoistas, absurdas. Vivimos  encerradoen nuestro mundo, ignorando a los que lloran, por miedo a olvidaqusolo nosotros importamos, qufuimos bautizados para sonreir, no para someternos al rugido del viento, ni  a la mar embravecida, ni a ahogarnoen medio del océano.
La pereza nos arrebata el sentimiento.

Ana Tapias

miércoles, 25 de noviembre de 2015

El dolor

LLevo meses justificando, entre lágrimas, mi huida, mi adiós, mi agónica despedida, a una vieja amiga. Me alejaba dmis otroamigos, me abroncaba si salía coellos, haciéndomsenticulpablcuando lo hacía.
 Ayer la vimos, iba con mi mejor amigo, a quienunca ha soportado. La paró, la saludó muy simpático. Quería irme, las piernano mrespondían. Me miraba dura, fría, con una mezcla de odio y de asco, apenas podía alzar mi ojos, no merecía esodio.  La saludé poeducación. Nos fuimos. Le repetí´a mi amigo, lo mal que lo pasaba al verla, quno hablará della delante mía, yo sufria.
Vimos a otros amigos. Lecontó"que la habiamos visto". Sentí como si me pegaran  cayerá al suelo,  y, no me pudiera levantar. LLoraba. Gritaba. Nadie me ayudaba. Era una víctima más.
A Idoia y a Fernando por apoyarme y pocreerme

Ana Tapias

martes, 24 de noviembre de 2015

Violencia de género

Nunca comprendí biecomo se sumaba, restaba, multiplicaba y dividía, pero hoy, Dia Internacional contra la violencia de género, lacifras me llevan a 48 mujeres asesinadaen España en el 2015 y 8 hombreasesinados.
Mi luz interior, la que mira a los ojos a la realidad, se apaga ecada muerte, ecada brutal adiós, ecada sonrisa apuñalada, ecada amanecedecapitado.
La violencia empieza por un acto, por una palabra, fuera de contexto. Si somos testigodenunciemos. 
La violencia ha de ser analfabeta.
A las víctimas

Ana Tapias

lunes, 23 de noviembre de 2015

"Frankeistein 04155"

"Frankeistein 04155", es un documental dirigido poAitoRei. Aborda las incompetencias, explicadas por técnicos, por las quse produjo el accidente que tuvo el Alvia S 04155  en la curva de Angrois, el 24 de Julio de 2013. Murieron 80 personas, 140 heridos. Las víctímas reclaman"Verdad, Justicia y Reparación", y quscree una" Comisión de Investigación", que les ha sido  negada.
Me impactó el documental, no pude contener las lágrimas, no sabía ande, ni a quién a mirar. El padre, dCurro, el joven segoviano falleciden el Alvia, estaba enfrente mía. Luchaba contra la voz desgarrada de dolor, por acercarnos a la realidade uaccidente, quno debería habeestado  escrito en las estrellas.

A las víctimas.

Ana Tapias

Rafa

Recita en medio del silencio. Habla a travéde versos imbricados al sentimiento, al  duelo obligado qusuponel paso del tiempo,  al recuerdo de su abuelo "Victoriano", cuya voz palpa su memoria, cuya figura corretea poel pueblo, TreCasas, donde los besosabea tomate, donde lorelojes han descuidado  el ayer, donde la luna sonrie, donde la brisa abanica, donde lapalabras, de Rafa, acuñasueños.  

Cocariño a Rafa

Ana Tapias

sábado, 21 de noviembre de 2015

En el metro

Iba de pie, en el metro, hacía el Intercambiadode Moncloa. A mi espalda colgaba una mochila, en mis piernauna maleta, en mimanos un Kindle. Leía "Yo Soy Pilgrim". La señora mas próxima a mí, hablaba por el móvil con una amiga de otra amiga. En una parada, entrarodiez niños codos cuidadoras. Habia dos asientos vacíos junto a la señora mayor, ssentaron: una niña de nueve años, pelo negro, largo, ojomarrones. Llevaba un osito de trapo; uniño de nueve años, pelo moreno algo rizado, ojos azules. El niño miró a la señora "Hola", dijo, no le oyó. Una de lacuidadorase acercó. "No ssaluda a todo el mundo", le aclaró la cuidadora.
Al acabar la conversación, la dije quel niño la había saludado. La señora se puso a hablar al niño, quien la abrazó. La cuidadora murmuró que no tenía padres. La niña estaba aterrada, no paraba de moverse, nunca había montado en metro. Intentamos calmarla, ayudarla. Era muy díficil para ella escuchar.
En un vagóde la línea 6 del metro de Madrid, diez niñojugaban a sonrr a una realidad que los invitaba a llorar.

Ana Tapias

jueves, 19 de noviembre de 2015

Josefina

El domingo tuve que hacer cola  para entrar en el autobús de las 15.30,  que me traía a Madrid, me gusta sentarme en primera fila. Pocas veces me duermo, miro la carretera, observo el paisaje, imagino la felicidad de los hombres y de  las mujeres en las casas perdidas, insertas  en los pueblos que dejamos atrás. Subí al autobús pensando en que me tocaría en "la perrera", asi llamaban los estudiantes,  a los últimos asientos, cuando ibamos a la Universidad Autónoma a hacer una carrera.  Se me abrió el cielo, el primero estaba libre. Me senté al lado de una mujer mayor. A los cinco minutos  empezó a hablar, gracias a un comentario mal intencionado que hizo la taquillera al conductor del autobús."Las mujeres somos peores que los hombres",  dijo. No estoy de acuerdo con esa afirmación, pero, no tenía ganas de convencer a esa mujer desconocida, a quien estaba segura que no volvería a ver.
 Josefina es una octogenaria, con una salud de hierro, pelo blanco, media melena, voz pastosa. Habría sido una excelente violinista,  si no se hubíera cruzado en su camino su marido, Nicolás.  Me enseñó su foto, me dejó leer la dedicatoria. Ante mí,  las palabras de un desconocido que declaraba su amor ,eterno, a la mujer del asiento de al lado. Me pregunté¿ Cuándo tendría yo una foto como esa? No expresé mi soledad, callé,  y seguí escuchando su dolor, su vacio por llevar dos años viuda. Es Canaria,  se había enamorado  de un segoviano, no había logrado hacer amigos en la ciudad. Salió de casa para casarse. Siempre había estado muy unida a su madre, que murió a los 102 años.
Había viajado mucho leyendo. No recordaba los libros que había leido."Se me va la olla", decía cuando algo se la olvidaba. Sus palabras me llevaron a hacía dos años,  en otro viaje a Madrid, cuando una mujer igual a ella,  me contó  la historia que la había ocurrido cuando tenia seis años. Su madre se encontró por la calle a una señora,  la dijo" Que su ex compañera de trabajo se moría, que suplicaba agonizando su perdón,  por  todo el daño que la había hecho". Su madre dijo" que no la perdonaba". En  la obscura habitación donde vivían, no más grande que el autobús, sin una sola ventana. Eran muy pobres. A las doce de la noche, ateridos de frio en la cama, oyeron un puñetazo en la puerta.  Su madre alzó la voz"Te perdono", dijo,  y su alma pudo descansar en paz.
 Josefina cree que hay  vida después de la muerte. Yo no sé que creer, pero he de confesar que el trayecto de  Segovia a Madrid se me hizo corta gracias a Josefina.

Con cariño a Josefina.
Ana Tapias

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Cuando caminar ya no es lo mismo

Camino atiborrada, atenazada, sugestionada por la angustia, desde el viernes. Sé que no hay que tener miedo y esas cosas referentes a la normalidad, que dicen familiares,  amigos, enemigos, y  los politicos que lanzan ataques aéreros contra Siria, donde los efectos colaterales dejan a muchos inocentes sin vida,  pero algo cambiado en el mundo, ya no es seguro. Las balas pueden esconderse en cualquuer rincón, en cualquier atistbo de felicidad, en cualquier acto de cotidianiedad.
 Ayer, explicaba a mis dos sobrinos,  la forma de actuar si se encontraban con un terrorista disparando.  Debían esconderse, si podían, si no correr o hacerse los muertos. No me hicieron mucho caso,  pero sentí el deseo de protegerlos, de que no sufrieran  pòr una Guerra con combiantes alejados de la empatía, que matan sin pensar, sujetos a la idea de venganza,  que Occidente no ha escuchado  hasta que se ha visto atacada.
Camino sin la certeza de llegar a mi destino


Ana Tapias.

martes, 17 de noviembre de 2015

Caminando por Madrid

Caminaba por Madrid, algo despistada, me equivoqué de calle y aparecí en la maternidad de O`Donell, donde nacieron mis cinco sobrinos. Cuando vi una pintada que llamó mi desconcentrada atención."Muerte al Islam", se podía leer.  No  sabía si fotografiarlo o no. Al hacerlo supe que escribiría  sobre ello.
 No creo en casi nada, ni en casi nadie.   Fui bautizada en el Catolicismo, que  no practico,   ni tan siquiera como utopía, como tenue esperanza, como  consuelo al vacío que se encuentra tras la muerte. Comprender el Islam, he de  reconocer que me cuesta desde mi ateísmo, pero, respeto a quienes lo practican,  y, lo sienten en su interior.  No creo que el Islam, sea una religión que cause daño, ni a la que haya que perseguir. Aquellos que en su nombre crean duelo, dolor en la sociedad, hay que  juzgarlos y encarcerlalos.
El ser humano tiene la capacidad de amar con las palabras, con los gestos, con la suma de su sabiduria. Escuchemos a quienes hablan,  no a quienes matan, y no cometamos el error de ser como ellos.

Ana Tapias.

lunes, 16 de noviembre de 2015

Amanece en Paris

 Nadie duerme en Paris. El  estallido de la sangre mantiene con los ojos abiertos a los parisinos. La  Torre Eifel lagrimea entre los flashes de los fotográfos. Altares con velas y con flores cantan la  "Marsellesa". Las familas gritan dolor. Paris huele a guerra.  Amanece sin tregua en la ciudad cuyo horizonte ha sido bombardeado.

A los parasinos con amor.

Ana Tapias

sábado, 14 de noviembre de 2015

Paris

Anochel Estado Islámico masacró Paris, con la única soberanía con la que cuenta"la violencia". Fueron ejecutadas 130 personas, herida300 personas, decapitada la geografía de un pais. Las balas cortabael silencio, ametrallaba sonrisas, lohéroes caían al suelo.  El Estado Islámico parloteaba la autoría del atentado. Un grito de guerra recorre la vieja Europa.

A los víctimas.
Ana Tapias

jueves, 12 de noviembre de 2015

Noticias

Cada mañana, leo los periódicos buscando noticias que mempujen a sonreir, pero mi sonrises un caracol, srefugia dentro dsu concha.  Hoy mis ojose pierdeen un atentado en Beirut"40 sumisos cadáveredesplazadodsus vidas";e la caza del Jhon, el terrorista ,cuya imagen asociamos a un
 cuchillo, a una víctima arrodillada, vestida dnaranja, quimplora calladament no sedecapitada, USA bombardea Siria para matarlo; emiledrefugiados apostados al otro lado de la frontera arañando el horizontde libertad; eciudaderotaen mil pedazos. 
Hemos olvidado la fina capa qusepara la ternura del odio,  que adultera la intangible felicidad.

Ana Tapias

Violencia

Ayer una mujer fue asesinada en Sevilla, ya he perdido la cuenta de lamujeres víctimade la violencia en España. En el mundo, cada día son golpeados, son mutilados, so torturados,  so asesinados, milede hombres, de mujeres, de niños, sin ninguna razón, argumento, necesidad, a manode sereamantede la destrucción del sentimiento, de la vida, de la costumbrde moripoco a poco, a causa de una enfermedad. Seres bautizados con piel, con huesos, con cabellos, con hormonas, que matan para tender, para olvidar, para secuestrar su miedo. 
La violencia desoye, deshumaniza, destierra la belleza que atesora el amor.

Ana Tapias.

martes, 10 de noviembre de 2015

la Calle Real

ESegovia, mi ciudad, la Calle Real es lugade paseo, de encuentro de parroquianos creyentes, ateos, agsticos. Iba algo cansada de la caminata, cuando oí voces que me acercaron a sus vidas. Cuatro mujerede unos 70 años,  hablabade las tiendas que estaban  y de las quse habíadesdibujado.
 A veces mi hermana, Alicia, hace el ejercicio de volver al pasado. Entramos eespacioreservados a la memoria,  habitados po fantasmas con alma, acabo llorando al verlos. Lamujereseñalaban las ausencias con adoquinada nostalgia.
Seguí caminando, enfrentde la ferreteria"Arana" a punto de cerrar para siempre, un matrimonio charlaba sobre la tardanza del Ayuntamiento edarlos permiso para abrisu negocio." Todo llega", pensé. 
Ya casi estaba en la Plaza Mayor, mi cuerpo quería descansar. Un cura de los de antes: cosotana y pantalón, pasó a mi lado. A escasos metros, ucura joven,guapo, copantalón, escuchaba a una señora que comentaba" la igualdadel bien y del mal".
"La Calle Real bien vale una misa", pensé al entraecasa

Ana Tapias.

Ser o no Ser Español


El Parlamento Catalán ha votado por 72 votos frente a 63, la resolución para iniciar la"Hoja de ruta de la  Independencia". Yo nací en la entonces llamada "Castilla la Vieja", ahora Castilla y León,  msiento Española. Para mí ser Español, es amar el pasado qunos une, abrazando a ladiferentelenguas, tradiciones, banderas, sonrisas.
Para mí no ser Español, es llorar al presente qunoenlaza a formar una sola sombra. Respeto sus lágrimas, su afáde ser libres, su anhelo de abandonarnos, pero para lograrlo han de atenerse a la Constitución, sno lo hacen serán "Refugiados".
Ana Tapias

viernes, 6 de noviembre de 2015

Parados


 
Atención: A077 mesa 6, A078, mesa 1, A079 mesa 5, anuncia un panel. Estoy en la Oficina de empleo. Dos filade bancoestásituadas frente a las mesas de los empleados,  msiento. Una mujer mda su número eel A092, el mio es el A095."Nos cambiamos los números para no esperar tanto"dice. No sé a quién ofreceré el mio. El murmullo es incesante."Un
  poco dsilencio", pide una voz anima. Miro a mi alrededor, me choco contra rostros que lloran. Una mujer ssienta delantde mi, la tocó la espalda, la regalo mi número, esboza una sonrisa forzada. Mí número aparece. Acabo en cinco minutos. Salgo, la cola llega hasta la puerta, sus caras formael mapa del dolor de la España sin trabajo.
Ana Tapias.

domingo, 1 de noviembre de 2015

Lluvia

La lluvia, cae temblorosa sobre los tejados, roza el suelo, acaricia a las hojas, moja unos pies, estádesnudos dsueños. Han olvidado lo ques un hogar, dormir bajo un techo, comer caliente, echarse la siesta viendo la televisión, mirar la lluvía tras los cristales con la certeza quen algún momento parará, quejarsdel trabajo y de los compañeros, ir a hacer la compra. Las gotas se posaen sus ojos, llora. La lluvia le arrebata lesperanza.
Ana Tapias