domingo, 10 de enero de 2016

La mamá de Luis Callejo

Llegaba cansada a la Intercambiadode Moncloa, a las 17. 15. Saqué el billete para las 18 horas, fuí al andénúmero 9. Hablé con Gonzalo de seis años y su madre, mientraesperábamos que llegara la hora. El conductor abrió la puerta, lensé mi billete. Msenté al lado de la ventanilla, en la primera fila, subía la gente y nadie elegía el asiento contiguo al mio. Una mujer mayor miró el hueco vacío e introdujo su cuerpo eél. Había mucha cola para entraeel bus. "No va a caber tanta gente", dijo. El conductor fue a buscar un papel coel número de pasajeros." A vesi hay algo raro eel autobús", dijo asustada e inquieta.
El conductor volvió, ssentó, arrancó el autobús. La mujessantiguó. A mí msorprendió, pero recordé cuando yo lo hacía al salide casa, impregnada del catolicismo de las Madres Concepcionistas. 
"Lo paso fatal viajando, pero mi hijo tuvo un hijo"Telmo", poeso vine a Madrid",  dijo. Empezamos a hablar, a travéde los kilómetros qu separan Madride Segovia, me adentré en la vida de M. Paz. Viuda de Alfonso, madrde seis hijos, uno de elloel actoLuis Callejo. Me contó cómo había descubierto su pasión por la interpretación, dejando la carrera de Derecho, trabajando por la noche para pagarse la carrera de ArtDramático, que podía actuaen tres idiomas. Tiene una película ecartelera"Palmeraen la Nieve". Hacde malo. Sabe que a su madrno le gustara verleese papel, asi que  la  ha sugerido quno vaya al cine.
También hablamode mi madre, a quieconocía desde joven, de queSegovia había  muchacolillas por la calle, y del colegio Concepcionistas, y de sus profesores. 
M. Paz se la hizo corto el trayecto y yo descubrí lacandilejade un hombre fiel a uescenario.

A M Paz.

Ana Tapias

No hay comentarios:

Publicar un comentario