Hay días donde uno, no sabe si se meterse debajo de una sombra o dejarse quemar bajo el sol. Cualquier decisión puede ser única y trascendente; puede cambiar nuestro destino; puede acomsejar a nuestras emociones interiores; puede bañarse en nuestros cantos bajo la ducha; puede escuchar nuestros silencios de madrugada; puede olvidar los abrazos. Por eso, hemos de aprender a mirar la vida cara a cara, sin miedo, ni prejucios, y actuar siguiendo nuestros sueños, que son los únicos que nos salvan de la derrota.
Ana Tapias( todos los derechos reservados)©