La violencia es un cisne que picotea un zapato, que mancha de sangre un pantalón y le cubre de soledad.
En Ucrania las calles son ocupadas por hombres con balas. Nadie puede parar la sesgada paz, cortada en mil pedazos, de huesos , por alguien que un día se aburría, y decidió sacar un mapa, donde distribuir los soldados, y jugar a ser Dios en medio de la rutina. Cuando el cisne despliega sus alas, y pide comida, es difícil que cierre sus alas, sin llevarse nada a la boca.
La violencia recorre los silencios de los muertos , ante la indiferencia de los vivos.Ana Maria Tapias Garcia.
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