Es curioso, ver como se abrazan el invierno y la primavera; la escarcha inunda la flor, la posterga, la margina, la invita a suicidarse, a no creer en ella, a morir en silencio, a llegar al ayer, a fulminar su deseo de inmortalidad, que susurra al amanecer para no helarse y formar parte del hoy.
Ana Tapias( todos los derechos reservados)©
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