Cámaras muertas-

Las imágenes siempre impactan más que la misma realidad. En mi memoria encuentro la imagen de una cámara de televisión tirada en medio de un pasillo. Un pasillo de Canal 9 cerrado por el despilfarro y la manipulación de sus políticos.
En Valencia se convoca una manifestación en contra de aquellos que no son capaces de asumir la libertad de expresión de su gestión. Se vive mejor sin las criticas. Pero la criticas son arma de la evolución. Evolución de una sociedad que piensa en libertad. La libertad no debe ser cerrada por las manos y las mentes de políticos que sólo sueñan con perpetuarse en el poder. La libertad de expresión es un derecho real no imagen prefabricada. Los derechos han de respetarse y a veces los ciudadanos han de velar  porque se cumplan si sus politicos no lo hacen. Las cámaras muertas deberia ser un cuento de Ray Bradbury, no parte de la realidad.

Ana Maria Tapias Garcia.

No a la soledad

Tal vez el otoño con sus árboles sin hojas inviten a la soledad. Soledad cantada por los poetas,  seres melancólicos y llenos de angustias emocionales. Soy mala poeta mis angustias las apagó con sonrisas de realidad y la realidad es compartir. Compartir alegrías, tristezas con amigos.

En uno de mis bares de cabecera conocí  a una mujer mayor con la que hablo.   La gusta caminar y tomarse unos chatitos con su hija. Ayer la vi y cuando se iba la dije" me alegra que sea feliz" y me contestó" soy feliz porque  tengo unos hijos, y nietos maravillosos que me quieren"- A lo que añadí" yo también la quiero" y me dio un abrazo. Un abrazo que me reconcilió con los abrazos y sentí que la vida es algo más que la alabada soledad. La vida es decir·"te quiero"  aunque sea en medio del otoño.

Ana Maria Tapias Garcia.

La realidad es una foto

La realidad muchas veces la conocemos a través de las fotos. Fotos de niños llorando, de presidentes de gobierno ganándose su sueldo no entregando a pavos a los cocineros y de víctimas con sueño atrasado por ver a sus vidas destruidas. 

Encuentro las fotos de Banguí ,en la República Centroafricana,  que se debate en una guerra lejana que no afecta a mis pies  pero a si a mis dedos que quieren escribir sobre ella. Ellas y sus fotos. Fotos de tanques con soldados que se dirigen a matar. Se matan entre ellos y poco o nada podemos hacer para eliminar su sufrimiento. Sufrimiento que parece una foto diluida en la distancia. Una foto con caras que olvidaremos en nuestros marcos de realidad.

Ana Maria Tapias Garcia

Hacer cola

Cuando el frio ilumina las calles es difícil esperar en la cola. Ayer a las 18. 40 tuve que esperar durante veinte minutos para sacar entradas para mis padres. Pensé que me iba a aburrir. Pasé un rato divertido  gracias a mis compañeras de espera: mujeres que habían superado la barrera de los setenta y cinco. Sus comentarios sobre los taquilleros y la gente que iba delante nuestra llenaron de calor mis mejillas. Era la única mujer joven que tenían a mano para hablar. Fui feliz con ellas. En la vida hay que aprovechar los ratos de espera para sonreír. Ratos donde la vida es parte de una cola que no desespera. 

Ana Maria Tapias Garcia.

Se busca a presunto inocente.

Se busca a presunto culpable que recurrirá la sentencia por supuesto. Los hombres de negro nunca defraudan a hacienda. Se busca a presunto culpable cuyas declaraciones son una ofensa para el sentido común. El sentido de común de muchos desahuciados por políticas como las del hombre de gafas negras. Hombre que oculta sus ojos de la verdad. La verdad llora en las esquinas mientras él se atrinchera en su inocencia. Inocencia que se busca. Inocentes son aquellos a quienes han arruinado gente que ahora se oculta.

No dejemos que los hombres de gafas negros escupan en nuestras vidas.

Ana Maria Tapias Garcia.

Cásate y sé sumisa.

Hay libros que deberían estar cubiertos de hojas como las calles de mi ciudad hoy. No entiendo que ninguna mujer quiera ser sumisa. La sumisión es una forma de esclavitud. La sumisión ata el sentimiento no le crea.

 Hay libros que asesinan como ciertas palabras dichas en contextos de superioridad. Hemos de calibrar el poder de las palabras sobre los demás. Los demás no deber sumisos de nuestras frustraciones ni desengaños, eso parece el libro de cuya autora no quiero acordarme.

Ana Maria Tapias Garcia.

Cuchillas

No imagino a las cigueñas cortándose cada vez que se posan en los dificiles puntas de la catedral de Segovia, Si imagino a los inmigrantes cortándose en las cuchillas que hacen de frontera. La fronteras han de ser respetadas y en vez de colocar aguerridos machos con metralletas,  insertan cuchillas que son pequeñas balas que desgarran. Desgarran el dolor de aquellos que nada tienen salvo la esperanza en una mundo mejor. Un mundo sin cuchillas. No imagino a las cigüeñas sin poder volar por heridas en sus alas.

Ana Maria Tapias Garcia.

Dia 25 de Noviembre. .

Yo soy mujer no víctima. Yo no soy un número más en una cadena de cifras. Yo no soy. Eso podría escribir una mujer maltratada. Una mujer cuyo aliento pende de un hilo, el hilo de un hombre que la maltrata. El hilo de una sociedad que ha de condenar y salir a las calles cada vez que una mujer es víctima. No a la violencia.

Con todo mi cariño a las 45 mujeres asesinadas.

Ana Maria Tapias Garcia.

Parecidos siniestros

Llamo parecidos siniestros a dos noticias que creo les tienen. Por un lado: las sagas familiares que ocupan los puestos de sus padres y por otro lado la esclavitud. Las sagas familiares nunca nos abandonan son como un buen desodorante. Olvidando a las personas que realmente deberían ocupar esos puestos. No hay que irse muy lejos para ver el enchufismo. En mi ciudad conozco casos alarmantes de ineficacia que se perpetúan  en el poder y nada se puede hacer contra ellos.
La esclavitud se hereda en el sudeste asiático y el oeste africano ante la indiferencia de las oligarquías locales asentadas y calentitas en sus puestos de poder." Ande yo caliente ríase la gente" de Góngora es el verso que siempre está de actualidad: verso con parecidos siniestros. Verso con hombres y mujeres que ríen desde sus apellidos mientas otros ignoran como hacerlo.

Ana Maria Tapias Garcia.

Historias de vecinos

A las tres de la mañana llamaban a la puerta de casa.  El vecino del tercero, vivimos en un segundo, piso. Su historia parecía creíble " oía caer el agua" Hace año y medio la vecina del tercero que vive encima nuestra se dejó el grifo abierto y nos llenó de goteras casi toda la casa.
No sabiamos dónde estaba ni cómo localizarla. No aparecían manchas en el cuarto de baño. Tras media hora donde todas las posibilidades jugaron en nuestra imaginaciones  nos fuimos a dormir con la esperanza de no ser agua. En mi cabeza oia el ruido del agua y pensaba en que estaba siendo torturada por el destino.  El destino era asi y yo sin flotador, no sé nadar. No se ha inundado la casa era una cisterna rota. 

A las tres de la mañana un vecino en pijama me ha dejado ahogada en mis pensamientos.

Ana Maria Tapias Garcia

Hoy hace 50 años

50 sin JFK. Es doloroso pasados tantos años ver su asesinato. Pasados tantos años estamos acostumbrados a la crueldad y parece que nada nos duele. A mi me duele ver a Kennedy tiroteado desde una azotea. Sonríe con su mujer al lado. Sonríe ante su inmortalidad. Sonríe a la cámara y la cámara le dejará en un descapotable. Jackie nunca será mas primera dama. Jackie llorará a su marido, aunque no fuera feliz con él. JFK es un mito y los mitos nunca se abandonan a pesar de ser imperfectos. No creo que Kennedy quisiera ser perfecto sólo ser un hombre educado para ser presidente. Un hombre enmarcado en una saga cuya historia siempre aparecerá ligada a la desgracia.

Ana Maria Tapias Garcia

Los otros habitantes de la calles de Madrid

Son seres anónimos que tocan en las esquinas sus vidas. Tocan mientras la vida pasa delante de ellos. Tocan solos y con lágrimas imposibles de descifrar en sus notas musicales. Tocan mientras los coches inmunes a sus latidos siguen pitando. Todo el mundo corre y es infeliz y ellos siguen tocando sus vidas en las esquinas.

Ana Maria Tapias Garcia

Las otras calles de Madrid

Son calles donde el lujo se cuelga en sus ventanas. Calles donde la vida es un escaparate de color. Un escaparate donde pasear sin pensar en los demás. Los demás sobran en las vidas donde el lujo es una forma de vida. Los demás son colores sin sustancia en los días donde todo es accesible. Los demás no transitamos por las otras de calles de Madrid, pues somos invisibles a un lujo que debería mirar la realidad de las esquinas.

Ana Maria Tapias Garcia



Los habitantes de las calles de Madrid

Viven en las esquinas sentados  cubiertos de nada. Piden para ser otros.  Viven ajenos a los escaparates donde glosan sus miradas. Viven en el dolor y es difícil mirarlos, pero alguna vez alguien deja escapar unas monedas de sus vidas y entonces se suben a los escaparates y miran. Entonces están más cerca de ser parte de la realidad, mientras tanto vivirán sentados.

Ana Maria Tapias Garcia.

Los habitantes del metro de Madrid

Viven como si fueran actores, en medio de un parada de metro sueltan su vida" Soy parado, el gobierno no me ayuda, tengo hijos, necesito comer". Nadie mira al actor, ni tan siquiera le aplaude. Algunos sacan unas monedas con los que aliviar su conciencia. Le deben dinero al actor,   él lo sabe. El actor camina entre la indiferencia y vuelve soltar su vida esperando unas monedas.

Los habitantes del metro no están empadronados en él, pero viven en él.

Ana Maria Tapias Garcia

Las calles de Madrid

He llegado a Madrid a las 8 desde Segovia. Un viaje lleno de niebla y agua nieve, sin accidentes. Cuando he salido del metro esperaba encontrar las calles limpias, pero no ha sido asi. He visto los restos de la lucha en la calle donde vive una de mis hermanas. Una calle cercana a la Plaza de Toros donde la basura se extiende por la acera. En Moncloa las papeleras rebosaban de restos. Estos días de huelga hemos descubierto la importancia que tiene la lucha y la importancia de ser basurero. Sin ellos viviríamos rodeados de nuestras miserias.

Ana Maria Tapias Garcia

Recuperar la memoria.

La memoria de los que fueron " perdedores " de la guerra civil ha de ser recuperada. No se debe olvidar sus muertes ni sus vidas atrapadas en la nieve.  Encuentro sus rostros en un documental" Los últimos supervivientes del genocidio". Encuentro sus cádaveres en las fosas que abren.
 Vivimos en un mundo que no sabe escuchar sólo sabe enterrar. Entierra el dolor y los sentimientos. Vivimos en un mundo egoísta. Mundo que aparca la verdad por ser más feliz. La felicidad hasta cierto punto es saber la verdad.

Ana Maria Tapias Garcia.

La nieve

La nieve  me lleva a una imagen de mi infancia  con mi abuelo  como protagonista. Recogía la nieve del balcón de su dormitorio en un recogedor azul. Me sonreía mientras la quitaba.  La nieve es él.   La nieve deja un poso del ayer con el que siempre me gusta reencontrarme. Luego ya con el recuerdo en su sitio afronto la cantidad de ropa que me tendré que poner para no pasar frío y las botas para no caerme,  pues la nieve resbala. La nieve se irá rápido como los recuerdos y me abrigaré para soportar el frio de la realidad.

Ana Maria Tapias Garcia.

José Fernando

Cada vez que enciendo la televisión  veo a J.F.  al lado a las dictados comunitarios a Rajoy" más ajustes" y me digo" vaya y J. F. en la cárcel". Es la victima de un mundo cruel que no ha sabido llegar a su corazón y las calles de Madrid llenas de basura. Que los empleados de Tragsa se niegan a recoger la basura y Madrid será un campo de batalla y J. F  en la cárcel y eso que su madre le dejó un millón de euros de herencia. " A picar le ponía", dirán los lugareños con buen tino. Los lugareños hombres  de paciencia ilimitada no entienden a José Fernando , ni a Woddy Allen que  siempre iba  al psiquiatra con lo fácil que es confesarse con el parroco del  y J. F. en la cárcel.

Ana Maria Tapias Garcia. 

Violadores en libertad

Violadores  se ocultan debajo de gorros y bufandas. Conozco sus nombres y sus condenas: García  Robao, Pedro, condenado a 1.721 años por 70 violaciones y Luis Gallego, condenado a 273 años por la violación y la muerte de dos jóvenes.
Tengo miedo,  ya lo tenía desde que el verano pasado,  un hombre nos siguió a mi amiga y mí.  Tuvimos que llamar a la policía.  No he vuelto a bajar sola donde sufrimos el " acoso" y tengo más cuidado,  miro quien viene detrás. He tenido que avalar mi miedo delante de mucha gente, que me ha llamado " exagerada". No existe lugar para la exageración cuando el sufrimiento es evidente.

Deberíamos exigir a quien excarcela  que nos dejen ver sus rostros.
La ley aparte de cumplirse ha de evitar futuros delitos y los violadores es sabido que nunca se rehabilitan ni se arrepienten. La ley que todos respetamos como si fuera el único Dios ha proteger. 

Ana Maria Tapias Garcia

Cuando frio el llega

Cuando el frio llega la nostalgia del verano se instala en nuestros recuerdos. Recuerdos que caminan abrigados detrás de la primavera pero antes hemos de sentir la nieve. Siempre me produce emoción ver nevar. Asisto a la lentitud del tiempo, tiempo que parece inagotable, tiempo que no me deja ser infeliz. La infelicidad es algo innato al ser humano, es como una corriente que te recorre el cuerpo cada vez que alguien se acerca y te deja su frío interior. El frio cubre de bufandas rostros que lloran. Rostros que recuerdan.

Ana Maria Tapias Garca.

Basura

Parece que sólo nos acordamos de la basura cuando no la recogen. La basura no es una lucha de partidos ni de televisiones que buscan el sensacionalismo.  La basura son los basureros: hombres y mujeres con vidas que quedarian rotas si les despidiesen. Conozco a uno Madrid y otro en mi ciudad.  El de Madrid es un familiar a quien quiero. Un hombre casado, con una hija. Un hombre de sonrisa sencilla. El de mi ciudad se llama Israel, y es uno de las personas más cercanas que conozco. Detrás de su escoba se esconde un hombre lleno de  palabras que acarician a quienes se encuentran por la calle, para todos tiene un saludo.
Detrás de los hombres y mujeres que esparcen la basura hay historias cuyas sonrisas pueden ver eclipsadas por un ERE.

Ana Maria Tapias Garcia.

Doctrina Parot

Me repugna que asesinos, violadores y demás calaña que estén libres. Pero creo que las sentencias han de cumplirse. Me repugna ver sus caras victoriosas al salir de la cárcel mientras sus víctimas son un montón de esqueletos que lloran desde sus tumbas. Me repugna que sonrian ante sus esqueletos y crean que han cumplido su condena. Su condena son ellos mismos. Ellos asesinos, violadores. Ellos nunca deberían volver a ser felices y dudo que lo sean con los esqueletos en sus manos. Manos que la justicia ha decidido sean libres.

Ana Maria Tapias Garcia

No más muertes de mujeres

42 victimas este año son millones de ellas. Cuando una mujer muere toda la sociedad lo hace con ella. Ella no volverá a sonreír. Ella  no volverá, es el drama al que se enfrentan muchas familias. Familias anónimas que comerán  turrón en navidad y besarán  a sus hijos al irse al colegio. Familias que nos obligan a no perdonar a los asesinos y a decirles: BASTA YA .

42 víctimas son demasiadas.

Ana Maria Tapias Garcia.

Escena cotidiana.

Ayer contemplé una escena cotidiana con esmero.

Un hombre bien vestido arrojó al suelo una bolsa de gusanitos vacía. Siguió su camino tranquilo, inconsciente de su delito. Las bolsas como los ricos también lloran. La bolsa derramaba lágrimas mientras se tambaleaba de uno al otro lado del suelo, no tenia fuerzas para elevarse. El viento había decidido que agonizará en el suelo.  Señores, señoras y niños seguían su camino indiferentes a su sufrimiento. Ellos también se tambalean y nadie les ayuda.  Ellos también se vacían  y nadie les ayuda. Ellos sólo ellos pueden  recoger la bolsa y ser humanos. ¡ No hay humanos!

Ana Maria Tapias Garcia.

El tifón y la destrucción

El tifón y la destrucción podría ser el titulo de un cuento de Gabriel García Márquez, pero no lo es. El tifón bautizado como " Haiyan" ha dejado rostros sin nombre. Rostros arrojados a la nada. Nada de sus vidas destrozadas en un pedazo de aire con mala leche. Rostros cuyos familiares se empeñarán en recordar hasta que sus memorias fallen. La memoria siempre falla a pesar de las fotos que son la otra memoria: la memoria en blanco y negro.  Memoria de un tifón de cuyo nombre no quiero acordarme.

Ana Maria Tapias Garcia.

Mi primera marcha

 

Mis pies se están acostumbrando a caminar en contra de las injusticias. Hoy hice 12 kilometros más o menos. He tenido momentos de dolor de pierna derecha, pero he continuado. He continuado con decisión no soporto más que usen el dinero público en negocios privados.  No soporto que la especulación de unos pocos nos afecte a todos. No soporto el dolor en las vidas de aquellos a los que recortan sus derechos. Mis piernas están cansadas pero mi pensamiento sonrie y seguirá caminando.

 

Ana Maria Tapias Garcia

Y el más guapo es.. Y la más guapa es...

Parece ser que de momento el más guapo es Rubalcaba y la más guapa es una escultural Venezolona. Voy a meditar porque ha quedado ella la primera y no la española. Carme Chacón debe estar harta de parecerse al pensador de Rodin de tanto como la da vueltas a la mente. Un dia de estos la veremos en un parque deshojando una margarita" me quiere no me quiere el partido".  No todo es real en la belleza existen cirujanos que la bautizan de nuevo. Tal vez los segundos deban acudir a los cirujanos para ser los primeros, tal vez no sean felices siendo el número 1.

 

Ana Maria Tapias Garcia

Pinturas románicas

Pinturas románicas sobreviven algunas escondidas otras no. Sobreviven a las interpretaciones de los entendidos y de los no entendidos. Sobreviven con minusvalias silenciosas que claman ser restauradas. Restaurar tiempos donde las imágenes eran más valiosas que las palabras. Tiempos analfabetos donde la cordura era un confesionario a donde acudir. Confesionario con reliquias impuestas ante las que nadie podia objetar. Nadie podia decir no ni tan siquiera las imágenes.

 

Ana Maria Tapias Garcia

Ser diferente

¡ Qué pasa cuando no eres como los demás y todos te acosan con sus miradas! Eres diferente por mil razones y todas llenas de verdad. Eres ateo en un mundo dominado por la religión. Eres simbólico en un mundo sin símbolos. Piensas en un mundo donde todos son borregos conducidos por pastores idiotas a quien nadie se atreve a contestar por miedo a ser encarcelado en el obstracismo.

¡ Qué pasa cuando miras las hojas escritas en el suelo mientras los otros fotografian catedrales!.

Nadie mira al ser diferente pues es más facíl asumir a otros que a uno mismo.

 

Ana Maria Tapias Garcia



El recuerdo

Es curioso como se asoma el recuerdo a nuestra memoria. Veo las imágenes de Amparo Rivelles y me cuesta imaginarla mayor con canas y demacrada. A mi memoria se asoma la mujer esbelta y guapa que fue , también fue la otra mujer:  la anclada a la muerte. A mis abuelos les recuerdo joviales y nunca llenos de arrugas. Es como si mi mente dibujará a otras personas no las reales. Las reales se ahogaron y en mi recuerdo sobreviven con flotadores. Flotadores de sonrisas.

Ana Maria Tapias Garcia

Ha muerto

Muchas veces cuando voy por la calle  escuchó las conversaciones de la gente al pasar a su lado y siempre es lo mismo" sabes quíén ha muerto". Conversaciones aisladas que no me dicen nada, pues no les conozco.  Las únicas muertes que me afectan son las me hieren por dentro y me dejan sin respiración.  Muertes que cada dia arrastro conmigo al caminar.
 En la pantalla la muerte que más me ha conmocionado ha sido la muerte de Chanquete. " Chanquete ha muerto" es una frase célebre de mi adolescencia, aún no sabía lo que significaba la muerte.
Hoy me he despertado con la muerte de Amparo Rivelles. Cuya voz adulteraba los espacios donde se posaba. Cuesta creer que su voz forma parte del  vacio. Cuesta creer que la muerte siempre llega. Cuesta.

 

Ana Maria Tapias Garcia

Memoria en blanco y negro.

Ayer vi un documental " Hablaremos de esto dentro de 100 años", que  recuerda  el centenario de la " Residencia de Estudiantes" que es memoria en blanco negro de unas vidas truncadas por la guerra civil.  Cruel e indebida guerra que asesinó a tantos inocentes, siendo la cultura una inocente más.

 Sentí el dolor de la derrota de la vida aquellos estudiantes que murieron, murieron todos en  las bombas.  Bombas que les aniquilaron sus sueños. Sentí el dolor de Lorca quien no pudo escribir desde su fosa. Sentí sus sonrisas esperanzadas en un futuro que no tuvieron. Sólo tenemos el futuro para soñar y a ellos se le arrebataron.

Ana Maria Tapias Garcia

Madrid es basura

 Madrid está lleno de desigualdades y la basura se explaya en sus calles. Calles con rostros invisibles para los zapatos con cordones. Zapatos que pisan basura sin pedir permiso. Zapatos con estrategias imposibles de vencer. Zapatos con dudosa reputación a quienes la basura importa poco, ellos cuentan con asistentas que barren sus casas y sus zapatos. Pero la basura no es un dogma de fe , la basura es una realidad que a este paso llegará a los edificios y nadie se sorprendará.

Ana Maria Tapias Garcia

¡ Quién debe dimitir!

Todos piden la dimisión de Wert que debe estar harto de estar cuestionado.  Soy de la opinión que  los ministros son marionetas de otros: otros intereses. Ellos nunca deciden. Ellos se limitan a poner caras mientras son manejados. Sus movimientos nuncan son libres . Sus gestos de idiota son impuestos. No creo que Wert deba dimitir pues sólo una marioneta y las marionetas nunca tienen vida propia.

 

Ana Maria Tapias Garcia

Pasar hambre

 Asumo mi primer virus estomacal de este otoño, y no puedo comer a no ser que quiera ir corriendo al baño, cosa que me aburre pues mi libro electrónico está indigesto con tantas palabras como llenan su memoria, y no quiere ir en contra de mi apetito, sino puedo comer tampoco comeré palabras. Palabras de hambre dibujan mi ansiedad. Tengo ansiedad de comer  arroz blanco, jamón york  y sólo bebo " acuarius", y pienso en la cantidad de hombres, mujeres y niños que sin virus se sienten tan mal como yo. Sienten sus cuerpos que se mueven en el aire pues están llenos de él. Son  cruel desalojo de la no empatia de una sociedad que mira para otro lado. Son despojos de dietas abusivas. Dietas del hambre pasan ellos. Son olvidados sentados en las calles con carteles  en sus piernas. Carteles escritos en cartones marrones reciclados de la nada. Recogen cartones para ser los olvidados, pues ellos tienen dignidad,dignidad dormida. Ellos son libres del hambre  pero su sombra  pasa hambre.

 

Ana Maria Tapias Garcia

Huelga en Madrid

Ayer estuve en Madrid y sus calles estaban limpias pero hoy no lo estarán. Los trabajadores de la limpiezan incia una huelga. Es triste tener que llegar a una huelga para ser escuchado.  La voz del trabajor ha de pintar sus necesidades llenando de agujetas los oidos de aquellos que deciden. Deciden con sus trabajos y sus necesidades ajenas a aquellos que crean solidaridad en calles y jardines. Calles y jardines que embellecen nuestras vidas. Todos somos jardineros y limpiadores de las calles en dias como hoy. Todos quienes amamos los derechos.

Ana Maria Tapias Garcia.

 

La vida

Hay veces que pienso que la vida es una escena en vagón de metro. Una escena sin concluir y llena de miedos. Miedos a no tener. Miedos a no saber. Miedos a no ser. ¡ Tantos miedos que cohiben nuestras miradas!. La vida aparece en blanco y negro tirada en medio de la nada. La vida es una duda con muchas sonrisas. Hay veces que pienso en la vida y otras me dejo llevar.

 

Ana Maria Tapias Garcia

No tengo washupp

Soy una persona rara a punto de ser devorada por la alcantarilla. No tengo washupp.  Cuando lo cuento me miran como sí fuera de otro planeta, en este planeta todos tienen que estar controlados al segundo. Cada segundo nos espian y no sólo los americanos, Todos somos Mata Haris encubiertos pero Angel Merkel no nos pedirá explicaciones, ni pondremos cara de sorpresa cuando nos descubran.
Al menos  no tengo Washupp no espio los momentos de libertad de cada amigo, conocido. Cada uno ha de ser soberano de sus momentos y el washupp es una tiranía. No a las tiranias.

Ana Maria Tapias Garcia.

Drone

Leo la palabra" Drone" y no sé que significa. La primera vez que ví la palabra, fue  hace una semana, pensé en la " guerra de las galaxias" al leer el periódico descubro otra guerra: la guerra contra el terrorismo. Guerra que cuenta con aviones con control remoto. Aviones como los de juguete pero que tiran bombas. El arte de la guerra siempre evoluciona más que los corazónes que no creemos en ella. La violencia es un arma que cuenta con miles de herejes de la paz para llevarla a cabo. Herejes que entienden la vida como una circunstancia de dolor y ejecutan a las personas que no piensan como ellas. La violencia ha de ser desterrada del mundo. Un mundo cuya única arma sea la sonrisa.  Sonrisas tripuladas. Eso sería un mundo escrito por Julio Verne en una de sus maravillosas novelas donde los drones serían ciencia -ficción.

 

Ana Maria Tapias Garcia.

No quiero leer más.

Quiero ser analfabeta del dolor que me causa la realidad. Quiero pasear ajena a vocales y consonantes con signos de interrogación. Quiero ser distancia de la violencia que inunda las páginas de los periódicos. No quiero llorar más, ni contamianr con mis lágrimas el vacio de las calles. Calles en las que parezco una caricatura dual. Dualidad de sonreir y llorar. Sonreir cuando no leo. Llorar cuando lo hago. Quiero ser parte de otro mundo y no de este. Quiero soñar en libertad.

Ana Maria Tapias Garcia.