Cuentacuentos

Ayer por la tarde asistí a una reuníón de gente , que ama los cuentos: una sesión de cuentacuentos. La escusa un homenaje a Eliana. Eliana se definía así misma como" La abuela cuentacuentos". Sus amigos contadores, subieron uno a uno a contar. Un niño ,marroqui, de madre española. Madre contadora de cuentos, que ha educado a su hijo en la tradición, nos acercó hasta Caperucita roja. Fue emocionante oirle. Oir a ese lobo con esas orejas y a esa abuelita devorada. Luego subió la madre ,intenrrumpida,  por su hijo de seis años, un prometedor contador y escritor de cuentos. Tras ellos una variedad de contadores: hombres, mujeres y una familia. Me recordaban a la Famia Trapp. Está familia se compone de tres niños de diferentes edades. Siendo la narradora la madre. Su cuento fue " Los tres cerditos". Hace poco se lo conté a Santiago, mi sobrino mayor. Lo que más me gusta cuando estoy con Santiago es inventarme los cuentos. Le pido  una palabra y con esa palabra empieza el cuento". Últimamente me dice siempre la misma": amor". Poco a poco voy logrando , que sea él quién cuente el cuento. Educar en las palabras es educar en la magia. La magia de hadas, principes, dragones, arco iris sin malicia.
Los amigos de Eliana, a quíén  oi tantas veces contar cuentos, recordaban sus frases. Para Eliana contar cuentos era" Un canto a la libertad!. Me quedo con la frase de esta Chilena que siempre empezaba sus cuentos de la misma manera:
HABIA UNA VEZ, HABIA UNA VEZ. y cerrábamos los ojos. Ojos de Eliana.

Ana.