jueves, 3 de abril de 2014

Terremotos

En Chile tiembla la tierra con fuerza, sin que los chilenos puedan agarrarse a ella. En Sebokeng, Sudáfrica, 200.000 personas  sobreviven sin agua, luz, hacinados en espera de la mejoras que tras veinte años sin Aparheid siguen si llegar. La discriminación racial no ha cesado de sus arrugas, ni sus pies ladeados en el sufrimiento. La tierra también se mueve a su alrededor, dejando grietas de marginación en sus hogares, que no lo son.  
Los terremotos sociales, políticos, y personales han de dar luz a la sociedad que debe crear mundos justos. Mundos con bombillas.  Bombillas que nos dan alegría en los momentos de hambre, sed, miedo, soledad, incertidumbre que todos vivimos, aferrándonos a la tabla de salvación que es la modernidad.

Ana Maria Tapias Garcia 

No hay comentarios:

Publicar un comentario