He visto los zapatos de mis sobrinos y sus regalos nada más levantarme, pero no sé si creer en los Reyes. El Estado el Rey Mago por excelencia, ha abandonado sus políticas sociales ,debido al trapicheo de favores con sobres, que han llenado las calles de hombres y mujeres que deben ser atendidos por el Estado.
Necesito creer en un Estado que actué como Rey Mago ante los no pueden ni sonreír.
Ana Maria Tapias Garcia.
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