Diálogos imposibles de la realidad, son como si hablara la farola con la catedral.
Obama y un inmigrante sin regularizar.
Obama: Debemos regularizar a todos aquellos que aman América, somos la nación insignia de los derechos humanos.
Inmigrante regular: No creo que le guste a mi jefe que sea legal, me tendrá que pagar lo mismo que a un norteamericano.
La Infanta y el Juez
Infanta: Está usted seguro que nadie desclasificará mi declaración hasta dentro de 50 años, no quiero que mis hijos oigan mi voz ante la justicia.
Juez: Esté usted tranquila, he dictado orden que nada de cámaras en la sala.
Holland y Vallerie.
Vallerie: Tuve que justificar tus cuernos con la política. Así quedamos bien los dos y no perderás votos de las mujeres fieles, eso si ganaras los de los hombres como tú.
Holland: Gracias, ya sabes que te sigo queriendo.
Es difícil escuchar dentro de un mundo de egoístas donde siempre la última razón la tiene uno.
Ana Maria Tapias Garcia.
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