Puestos a imaginar qué será de otras vidas, hoy me decanto que el hombre de barba, de gafas, de pantalón vaquero; que duerme la siesta en un parque, que sale de la Oficina de Correos, que compra en el Carrefour. Tal vez, sea un espia o un policía, que investiga una trama de corrupción en las calles de Segovia. En la Oficina de Correos, le dejan dinero. Desde allí telegrafía a sus jefes, les cuenta las últimas averiguaciones sobre pájaros, botellas vacías, papeles abandonados en el suelo, zapatos que lloran en los pies, uñas demasiado pintadas para respirar; perros que odian a sus dueños. Tal vez, sea sea un falso vagabundo, reconvertido en poeta de la supervivencia. Puestos a imaginar...
Ana Tapias
No hay comentarios:
Publicar un comentario