lunes, 30 de diciembre de 2024

Evolución del olvido




 El olvido evoluciona hacía la despedida, que sutura con la muerte de las personas, que usaron objetos, que envejecen sin cumpleaños.  Las tazas, son de mi abuela, Encarna;  que vive escondida en la memoria, de aquellos, que la quisimos; que acariciamos sus huellas, con devoción; sabiendo que tuvo que aferrarse, a la supervivencia de la postguerra; que creó espejismos de dolor, en aquellos, que silenciaron sus miedos; que inventó realidades, en aquellos, que callaron su derrota; que dibujó sueños en blanco y negro, en aquellos,  que escondieron sus ideas, para sobrevivir. Las tazas, realzan el silencio de unos años, que esconden el sufrimiento, al que le han salidos canas.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

domingo, 29 de diciembre de 2024

El tiempo


El tiempo se desvanece ante nuestras miradas, cansadas de atrapar sueños que se deslizan dentro del centrifugado de la incertidumbre, que acalla la esperanza de sobrevivir al mañana, que como si fuera una esfera de reloj, erosionada por el recuerdo; se despide lentamente para ser memoria en las memorias de aquellos, que nos sobrevivan hasta que, llegado un momento, partamos hacia el olvido.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

Niebla



 La niebla no invita a subir escaleras, sino a acurrucarse junto a un pijama de luz, donde distinguir entre el amor y el desamor; la alegría y la tristeza; la felicidad del sufrimiento, que se hiela en las calles; que llora en las esquinas, que agoniza en las ventanas, donde unos ojos, se suicidan cada atardecer al soñar con un mundo, que no se venda a la tragedia: pero siempre, queda vestirse de niebla para ser invisible  al dolor.
© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

viernes, 27 de diciembre de 2024

Soledad ante los desperdicios



© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

Camina junto a los desperdicios de gente, que han ejecutado  un ejercicio de felicidad; por eso, han bebido juntos, al sopor del invierno; han cantado al mañana sin miedo; han descuidado el fracaso por el sentimiento;  pero él, no tiene nada que arrojar al olvido; y,  esgrime pasos con la voluntad de alejarse de ellos, que nunca soñaron con él; que nunca le invitaron a reír; que nunca le hablaron de sus secretos, que se escinden en el hoy;  donde solo son espejos por conquistar; que él, inmerso en su incertidumbre, deja atrás .

 


domingo, 22 de diciembre de 2024

Soledad de la navidad


 En estos días, donde las calles de las ciudades se iluminan con luces( unas más exageradas que otras) nos invitan a pensar en la Navidad; es complicado para mí, decantarme por la creencia, el ateísmo, o el agnosticismo de estas fechas; donde uno siempre fantasea con la infancia, y las primeras emociones;  y  los  primeros  sueños; y los primeros regalos,  que nos acercaban a la felicidad; que con el paso del tiempo,  es recuerdo del pasado, donde cantábamos villancicos, sin temor a hacernos viejos y llorar por aquellos que también fueron viejos y ya no están.
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viernes, 20 de diciembre de 2024

Románico en las calles


 He nacido en una ciudad, donde las iglesias románicas rodean mi cuerpo, lo envuelven con sencillez, con austeridad, con suavidad; lo protegen del frio, para que no caiga en el olvido; lo invitan a soñar con el pasado; lo deslizan hacía la memoria, de aquellos, que están enterrados bajo el silencio; que se lee en las columnas, como si fueran palabras imposibles de abrazar, que vuelan hacia el universo; donde el tiempo construirá esculturas a las que admirar. El románico se ha instalado en mi mirada para morir conmigo.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

Personas

 

Encuentro en el periódico, a un conocido; la verdad, es que habré cruzado con él, algunas frases, pero sé que es buena persona, Se llama Juan Andrés Saiz Garrido, quien llegó a mi Facebook, por algún amigo en común. Sé que fue enfermero; sé que perdió a uno de sus hijos, muy joven; sé que es hijo de Gabarrero; sé que escribe palabras, que le llevan a sus abecedarios de supervivencia, que encuentra su espacio de libertad  en el bosque; donde es aquel que niño, que observaba a su padre como acariciaba los árboles, para vender la madera, que huele a ayer; que sigue viviendo en su memoria de la infancia, que le invita a ser árbol de hoja perenne en el invierno de castilla.

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jueves, 19 de diciembre de 2024

El silencio

  Parece un guante de niño, que tras correr, ha dejado su mano ficticia en el parque;  donde su fantasía le llevó a ser un héroe, que perseguía fantasmas de trapo, a los que descubrir detrás del otoño;  que se desvanece lentamente, para ser olvido, entre murmullos de la nieve; que caerá sobre muñecos de nieve, que sonríen con una zanahoria como nariz, que será atrapada por el paso del tiempo, y el silencio se escribirá en la memoria de un otoño más.

 


© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

jueves, 12 de diciembre de 2024

Un guante


 Un guante permanece perdido en medio del otoño, que se desvanece dentro del invierno, que avanza sin pedir perdón sobre la vida; que se camufla del frío, con capas de incertidumbre ante el mañana, que se colorea en la esperanza de seguir soñando con el ayer.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

lunes, 9 de diciembre de 2024

Una hoja, una mirada

Esta hoja, que permanecía erguida con decisión, habrá sido ajusticiada por el tiempo sobre su memoria, que yace escondida en el olvido, donde llorará su destino, imposible de evitar, inaccesible de abrazar, recóndito de soñar, que se escinde entre el hoy y el ayer para abrazar el recuerdo, que seremos todos.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

domingo, 8 de diciembre de 2024

No son mujeres

 Los talibán recuperaron el poder en Afganistán en agosto de 2021, desde entonces la sociedad ha sido fulminada por su dictadura; que afecta a todos por igual, pero hay un colectivo que está siendo torturado, que quiere ser eliminado de Afganistán, son las mujeres;  cuyos derechos, han sido asesinados lentamente, siendo uno de los últimos el uso de su voz; quedando relegadas a no ser mujeres, a ser un espacio donde llegar para que la especie siga su camino y no perderse en la memoria de un país sin justicia;  que pertrecha el sufrimiento como parte de la supervivencia de la vida, que no es vida, pues carece de esperanza, pues adolece de felicidad, pues niega los sueños de miles de afganas, que han enmudecido por la ley; pero yo, alzo mi voz por ellas, y canto su silencio, para que la música de sus corazones sea libre.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

viernes, 6 de diciembre de 2024

Despedida



 El otoño se despide lentamente, entre suspiros del invierno, que dejará a los árboles desnudos de esperanza, que invita al olvido, que se cobijara dentro del armario del ayer; donde el recuerdo aparecerá en el fantasma de la nieve, que un día, mi abuelo materno, me explicaba con gusto a eternidad, que era memoria de su infancia, que sobrevivía a la caricia al frio; que se calentaba junto a la leña y a los cuerpos de sus hermanos mayores; que le invitaron  a ser abrigo para su frágil esqueleto.  Cada otoño, siento nostalgia del ayer y lloro como si fuera una hoja sin destino.

A la memoria de mis cuatro abuelos: Evarista, Saturnino, Encarna y Leoncio, os quiero.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

martes, 3 de diciembre de 2024

Ignorancia


 

Esta bolsa de plástico que madruga, que se deja hacer una fotografía, que posa ausente de su destino; es la confirmación de la tragedia, que cada día, asoma a nuestras miradas, descompuestas en nuestros sueños en vigilia por la amenaza constante de la muerte, que nos hace ateos de la inmortalidad de nuestra memoria, que naufraga en el desaliento, de saberse olvidada.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

domingo, 1 de diciembre de 2024

Sobrevivir al recuerdo


 El recuerdo acariciado por la nostalgia es despedida, como si fuera una hoja enterrada, que susurra al mañana; sosteniendo la memoria de su olvido, que formará un abanico de silencios, en los que llorar dentro del destino, donde no ser palabra, solo ausencia sin horizonte.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

Frases sin destino

 

Las frases van y vienen, de boca en boca; algunas incluso se susurran, pero hay una que suena con voracidad en los últimos meses" Es lo que hay"; cada vez, que la escucho, mi esperanza en cambiar la realidad se rompe como si fuera un frágil cristal de bohemia, imposible de pegar a  mis sueños: que lloran en medio del silencio, que sobrevive encadenado a un mañana,  donde el sentimiento sea bautizado de felicidad, imposible de rescatar en una frase como” Es lo que hay”,  pero siempre hay frases sin destino, que terminan en el cubo del olvido.

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jueves, 28 de noviembre de 2024

Una hoja


 Una hoja que acaricia una calle poco transitada, desierta ignorada, por los seres que caminan ajenos a la nostalgia; se convierte en una duda de supervivencia, entregada a las lágrimas del destino, que ejecutará sus sonrisas para convertirlas en sangre de la memoria sin horizontes, sin estrellas, sin universos, sin nada, tan solo con el abrazo del olvido.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

domingo, 24 de noviembre de 2024

Otras guerras

 

Nombres que no se pronunciar, se ven envueltos en la guerra entre Israel y Palestina; debido al ataque terrorista sufrido el 7 de octubre por Israel. No hay tregua, solo silencios, solo lágrimas, solo dolor de los rehenes, de los asesinados en los ataques, muchos de ellos niños. El devenir de la guerra, no invita a la esperanza; el sufrimiento no es inventado es real; la muerte implora, grita, suplica, no ser la protagonista, pero nadie escucha a la vida, en esta guerra que ha de acabar.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

Perspectiva


 La vida nos somete, queramos o no queramos, a diferentes perspectivas, siendo una de ellas, la opción entre la lucha y entre la derrota. La lucha, es un camino instrumentado con sonrisas y con lágrimas. La derrota, es un bache desbrozado con sangre y con muerte; hemos de lograr un equilibrio entre la vida y la muerte, que nos deja en la monotonía de los sueños, que han de renovarse para no agonizar en el sufrimiento, que abraza al mañana.
© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

Sonrisas del agua.


Al otro lado de la rutina, queda el sosiego del agua, que es música para los oídos contaminados por la tristeza, que se expande como si fuera un eco de la supervivencia; que cansada, que ausente, que indecisa, camina en un parque en  otoño;  donde una fuente, esboza una sonrisa de agua; que cae, incesante sobre la soledad, de aquellos, que vagan con la incertidumbre del destino sobre sus miradas; que se alegran por el encuentro con la fragilidad de una fuente, que les recuerda que la vida pese al dolor, es un encuentro con la felicidad del momento.

 

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García

sábado, 23 de noviembre de 2024

Jardín sin hojas



En otoño, los jardines se despojan de sus hojas, que escriben en calendarios pasados; que interrogan al mañana, que suspiran al recuerdo, que vaga incesante, inquieto, indeterminado entre el olvido; que somos nosotros, que lloramos despedidas en medio del silencio, roto por el eco de la memoria.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

jueves, 21 de noviembre de 2024

Soledad

 El paisaje otoñal casi invernal, es un juego de soledades, de objetos, de destinos; que se alinean con los suspiros en medio del olvido; que nos invita a ser otros; a refugiarnos en el calor; a caminar agazapados en nuestros sueños; que se hielan sin abrazos; que se congelan sin palabras; que se abrigan sin nostalgias; esperando el advenimiento de la primavera, para hablar, para sonreír, para jugar con la esperanza.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

miércoles, 20 de noviembre de 2024

Suspiros de otoño




 

El otoño suspira entre despedidas, que van y vienen, entre el olvido que acaricia al destino, que imprime sueños frente al horizonte del ayer; que llora con eco de nostalgia; que invita a abrigarse; que canta silencios; que arma despedidas al compás del universo, que batalla contra abecedarios del mañana.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

martes, 19 de noviembre de 2024

Desahuciada


 

Aislada de la felicidad, se sumerge en el olvido, para dejar de ser importante; para dejar de ser hoy;  para dejar de ser superviviente; desahuciada por el silencio;  conminada por abecedarios mudos;  encerrada en su memoria;  que volará sin destino, hacia el espacio de donde nadie regresa el ayer.


 © Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

domingo, 17 de noviembre de 2024

Complot del silencio


 La vieja sirena, sobrevive ausente en su silencio, que la conmina a ser ayer;  donde alguien impuso sus manos sobre su destino; que son huellas imposibles de localizar en el horizonte; que informa de la erosión de las palabras que acarician soledades, que buscan lágrimas, que sueñan abecedarios, imposibles de escribir en las estrellas, siempre cae la noche sobre el olvido del silencio.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

jueves, 14 de noviembre de 2024

Soledad


 En medio del olvido, duerme esta hoja, que no importa, que no es vital, que no es necesaria, para los seres que caminan ajenos a sus sueños; para los seres que dibujan utopías; para los seres que cantan sin sentido dentro de la monotonía; que es incertidumbre frente al mañana; que se bambolea sin sujeción frente al viento, que decide quién sobrevive al destino

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

Los otros

 

De mi manual de costumbres, no se baja, leer periódicos atrasados, donde me nutro del ayer; una noticia del 23 de septiembre de 2023, encuentro, una imagen que agujerea mi corazón, acariciando agujeros de dolor, al sentir el miedo de un niño, de no más de tres años, a travesando la concertina de alambre del rio Bravo, para dejar la pobreza e intentar llevar una vida sujeta a la certidumbre de sobrevivir en  un país rico como es Estados Unidos; pero algunos, no logran y dejan su vida en el rio, como un niño de tres años, que murió ahogado por la necesidad de ser libre, de ser otro, de ser mañana. No deberían existir fronteras asesinas para aquellos que anhelan soñar sin miedo.

 © Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

miércoles, 13 de noviembre de 2024

Ella

 

Ella es Nuria Espert (1935) a quien encuentro, en una entrevista en un periódico atrasado, y pienso debo escribir sobre esta gran mujer. Sus arrugas que vagan entorno a  su rosto, dibujado sobre alfabetos, me conmueven, me inspiran, me invitan a hacer una reverencia ante su pasión por la palabra; que habla en cada personaje, que toma su alma como si fuera la suya; que burla al paso del tiempo,  para crear sin dar un paso atrás a mujeres, que se convierten en espejos del destino. Sé que la grandeza de Nuri Espert, reside en su lucha por ser ella.

 © Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

domingo, 10 de noviembre de 2024

Engalanar la infancia


 .Apenas recuerdo mi infancia, solo algunos momentos, hilvanados a un débil recuerdo, que me conduce a los juegos en la casa de mis abuelos maternos, donde tantas horas fui una niña despegada de su cruel colegio de monjas, donde lloraba cada momento; donde me asustaba cada segundo; donde imaginaba sin cesar, para salvarme de esas aulas, con monjas que dictaban a mi fantasía. Desde mi incipiente decrepitud, engalano mi infancia, para que sobrevivir a un futuro, donde seré una ilusión, en la mente de quienes me quisieron

A mis cinco sobrinos, con infinito amor
© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

Otoños

 

Se extingue el otoño en su apogeo de hojas sin retorno; su cenit lo decidirá el frio; siempre inhóspito, que encierra nuestras lágrimas en guantes, que son incapaces de dar calor a nuestros sueños; que se hielan en el olvido de otoños sin bautizar

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

sábado, 9 de noviembre de 2024

Una castaña


 Rescaté hace semanas, a esta castaña, que aún permanecía dentro de  su vaina; y desconocía el mundo que la rodeaba; la coloqué en la mesilla de mi dormitorio, para cuidarla, y que no fuera atropellada para los seres sin ojos, para los que no era importante; pero yo, necesitaba de su belleza contaminada de otoño; que deja un rastro de olvido en los parques; heridos de silencios; mutados de soledades; asidos a la nostalgia de sentimientos, que mueren en un instante, donde la vida sólo es un dibujo del ayer.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

Ventana a la incertidumbre


 Nuestros ojos cansados, por las rutinas, que nos obligan a ser otros; a participar en inverosímiles anhelos; a reciclar sueños del ayer; abrazan el horizonte susurrando lágrimas, pues tal vez el mañana, sea un esquivo puzle de alegrías, que secuestren nuestra esperanza, que duerme aterida frio bajo la incertidumbre.

 © Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

jueves, 7 de noviembre de 2024

Sudor del despertar


 Cada mañana, el despertador suena sin mirar atrás; asombrados los ojos, intentan comprender, que han de capturar sus sueños un día más; donde las emociones, nos acompañan como si fueran sombras desgastadas por la supervivencia; que abraza a aquellos que sonríen al destino; para ser memoria del hoy; para ser canto del ayer; para ser escritura del mañana; que silenciará nuestra esperanza.


© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

martes, 5 de noviembre de 2024

Ligereza de los sueños


 Muchas hojas con destino, se evaporan en el pensamiento; dibujan sueños que vuelan hacía el horizonte; donde el olvido creará sinónimos de lucha; para aquellos, que aún tengan fuerzas, para emitir abecedarios de esperanza; que proclamen que la verdad, solo existe para la memoria de quienes han amado.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.
Con amor a mis cinco sobrinos: S. G.T; A. F. G. T; G. G. T; M. G. T e I . F. G. T.

Hablar con el ayer

 Detesto mi etapa escolar, que cursé en el mismo colegio; desde los cinco años hasta los diecisiete (si no me equivocó) sufrí acoso, por parte de mis compañeras de clase, durante años. Hecho que me causó una profunda tristeza; una inabarcable inseguridad en mí misma; una agotadora depresión, nunca tratada; que voy superando con el paso de los años; pero aún, por las noches, tengo pesadillas, con sus rostros, que formaban parte de mi infierno: ellas reían, dentro de sus cuerpos horondos, henchidos, rellenos; mientras,  yo lloraba, dentro de mi cuerpo absurdo, patético, insignificante; que caía una y otra vez en la indiferencia del acoso sistemático;  que tuve soportar, abrigada por mi fuerza interior;  que nunca lloraba delante de las maltratadoras, que se alejaron de mi camino, al terminar el colegio; por desgracia, a  algunas, las he visto y se han seguido riendo de mí; de otras, sé de sus vidas por amigas suyas; y a las menos, hablo con ellas. Ayer, tuve que imponerme a la niña que fui, para entrar con una amiga, en la tienda, de una compañera de colegio, con quien no coincidí en clase, pero amiga de mis acosadoras y me sentí observada por el ayer; que me saludó, pero, no comenté nada sobre el colegio. Mi amiga (ya lo sabía yo) no estaba interesada, en la ropa de la tienda, de mi excompañera de colegio; pero no puede vivir sin dar discursos, aunque sea en una tienda de barrio perdida.  Al menos, tenía un perrito diminuto, que hizo que pudiéramos mirarle, sin detenernos mucho en nuestro deterioro; que es imparable como nuestras arrugas, las mías aún en penumbra, describen el destrozo de mi adolescencia por adolescentes malas, a las que nunca perdonaré. El maltrato es una huella profunda, que nunca se olvida.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

lunes, 4 de noviembre de 2024

Días de lluvia


 Una madre con su hijo, se protegen de la lluvia, con sendos paraguas; uno de colores y el otro sin ellos; que les resguardan del destino, que llora, cada día, pues puede ser el último de la nostalgia; que se inventa esperanzas para sonreír ante la incertidumbre; que juega a caerse, a levantarse, en las calles, donde la vida se despide con sueños mojados.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

domingo, 27 de octubre de 2024

Un hombre sin paraguas


 Un hombre sin paraguas, caminaba asido a su bastón, bajo la incipiente lluvia otoñal; que no cesaba; que repercutía sobre la calle, invitando a resbalarse; pero él, en su afán de llegar a su destino, seguía impertérrito al desaliento; conminado a la necesidad; sujeto a la probabilidad de convertirse en un hombre de la lluvia; que inundará el alma de aquellos, que torpemente sujetaban sus paraguas, para no empaparse; pero  a veces, es urgente ser valiente.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

Yo no soy

 María Trinidad Pérez de Miravete Mille( 1947-2009) más conocida como Mari Trini, fue una cantante española. Recuerdo su figura, enmarcada por su voz; cargada de matices. La verdad, nunca presté mucha atención a la nostalgia que desprendían sus letras. Leo un artículo sobre su vida, y empiezo a entender su pasión, su eco, su dolor, que le acerca a mi sentimiento, siempre azul, como sus ojos imposibles de olvidar; y como una de sus canciones, tal vez, la que más he escuchado, es "Yo no soy esa"; que es con los años un himno de su latido interior, que sobrevivirá en cada corazón, que acaricie su duelo con la realidad

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

jueves, 24 de octubre de 2024

Coser el ayer


 Este paño, es una herencia materna; mi antepasada nació en siglo XIX; lo cosió en 1865; me habla de ella, se llamaba" María Martín"; quien con sus manos, dejó una huella de su existencia; limitada por las comodidades; ausente de prisas; intimidada por la enfermedad; que algún  día, llegaría a su cuerpo, para postrarlo en el horizonte; donde sus puntadas, pequeñas puntadas, forman parte de mi memoria; que abraza su distancia; que anhela su consuelo; que besa sus abecedarios,  inmersos en su rutina, que nunca entenderé;  pero si, soñaré en mi vocabulario del hoy.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

Sudario del ayer


 

El ayer cristaliza envuelto en un sudario; desgastado, desdibujado, comprimido, por las lágrimas; que se acomodan en la mirada, de la multitud;  que camina absorta en sus preocupaciones; que come inquieta por la ansiedad; que devora sueños en las madrugadas; donde ellos, los seres que se fueron,  aparecen vivos como si fueran actores; que representan obras recicladas en la melancolía;  que suspiramos al despertar;  cada amanecer es un duelo del ayer.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias García.

miércoles, 23 de octubre de 2024

Soledad y otoño


 

Hay una soledad no buscada, que es la del olvido; que se contagia de parque en parque, cada otoño;  cuando los días, tienen más horas de oscuridad que de luz; y se dibujan sombras en medio del silencio,  que es incapaz de soñar; que es incapaz de hablar; que es incapaz de abrazar; y solo nos queda,  gritar ahogados en el ayer;  para que la nostalgia del frio, invite a nuestros cuerpos a desaparecer hasta la primavera, donde florecerá el mañana.

 © Todos los derechos reservados) Ana Tapias

domingo, 20 de octubre de 2024

Esqueletos del otoño


 El otoño, se descompone ante nuestras miradas, que callan asuntes, el sigilo de la despedida; que recorre las calles, buscando ser rescatada por el mañana; donde una voz clamara por las hojas invictas de sueños, que luchan por ser abrazadas por la eternidad.

© Todos los derechos reservados) Ana Tapias